Desarrollan jornada sobre la educación especial en contextos de crisis

El encuentro tiene lugar en la Sala Eva Perón del Centro de Convenciones ubicado en la ciudad de Posadas. Se distribuye en dos disertaciones, a cargo del psicoanalista y doctor en psicología de la educación y referente en educación especial, Alfredo Jerusalinsky. Por la mañana el profesional se refirió a “La atención temprana en niños en situación de riesgo”; a partir de las 17 abordará los “Indicadores de riesgo psíquico en la primera infancia”.

Esta actividad es organizada por la Cámara de Representantes de Misiones, a través de la legisladora Natalia Rodríguez; y el Programa Infancias Sin Etiquetas de la Secretaria de Extensión de la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales, de la Universidad Nacional de Misiones.

Rodríguez explicó que estas conferencias se realizan en el contexto de dos proyectos de ley. El primero, de la diputada mandato cumplido Claudia Gauto, promueve la creación del colegio de profesionales de educación especial; y el segundo, presentado en 2018 y referido al ejercicio de la profesión, de autoría de la legisladora Rodríguez.

“Las conferencias corresponden con un trabajo de revalorización y de conocimiento de la profesión, hacia el resto de la comunidad, para brindar información sobre qué implica y cómo interactúan los profesionales de la educación especial” y son también “un espacio para el debate y la construcción de los consensos necesarios para seguir avanzando”, dijo.

Para el disertante, de extensa trayectoria y reconocimiento, quien además preside una fundación en la temática, ubicada en Capital Federal, “Misiones se ha tomado la misión de ocuparse seriamente de la problemática de la discapacidad, de la prevención temprana y del anticiparse a los efectos de destrucción social que la discriminación y la exclusión social provocan”.

Hablar de inclusión –entonces- refiere “no solamente al nivel escolar, sino también social, colectivo y de participación en el conjunto de la vida de la provincia de todas las personas que, con su singularidad, particularidades, suficientes o insuficientes, medidas o desmedidas, puedan recuperar lo que las caracteriza centralmente: su condición de ser seres humanos”, manifestó Jerusalinsky.

Debemos “considerar a nuestros semejantes como semejantes, como iguales a nosotros más allá de su capacidad productiva, de su fortuna, de los objetos de los que dispone y de su inteligencia abstracta”, expuso.